...Y que despertamos de un sueño casí convertidos en seres humanos!!!
Fueron miles de millones de años de espera en la total oscuridad, incrustados en el fondo del frío universo...Fue la noche y el silencio los que nos arroparon y no revelaron cosa importante alguna :Supimos tranquilizarnos, considerar nuestros entornos, mirarnos, reflejarnos, unirnos, pensar, hablar y luego actuamos...
Y finalmente un milagro asombroso, increible, una obra inversosimil, una realidad inimaginable: Respiramos por la vida y exhalamos gratitud.: El momento del nacimiento es muy especial, toda una fiesta y después de tanta fría oscuridad: ¡La belleza! como campanas de fiesta que tañen y dicen: Vivan, vivan, porque pronto todo muy rapído pasará. Todo a final de cuentas en este mundo verde-azulado, se derrite, se evapora, se opaca...Digamos que es la vida necia, alucinada, instalados en lo falso que somos ahora..Otra vez la realidad: En la existencia de todos los días, la de siempre, en donde hacemos esto y aquello, visitando esos y aquellos lugares, instalados en el vacío existencial, en la vaguedad. Estamos de vuelta, olvidando la sencillez del milagro de estar con vida...
Fueron miles de millones de años de espera en la total oscuridad, incrustados en el fondo del frío universo...Fue la noche y el silencio los que nos arroparon y no revelaron cosa importante alguna :Supimos tranquilizarnos, considerar nuestros entornos, mirarnos, reflejarnos, unirnos, pensar, hablar y luego actuamos...
Y finalmente un milagro asombroso, increible, una obra inversosimil, una realidad inimaginable: Respiramos por la vida y exhalamos gratitud.: El momento del nacimiento es muy especial, toda una fiesta y después de tanta fría oscuridad: ¡La belleza! como campanas de fiesta que tañen y dicen: Vivan, vivan, porque pronto todo muy rapído pasará. Todo a final de cuentas en este mundo verde-azulado, se derrite, se evapora, se opaca...Digamos que es la vida necia, alucinada, instalados en lo falso que somos ahora..Otra vez la realidad: En la existencia de todos los días, la de siempre, en donde hacemos esto y aquello, visitando esos y aquellos lugares, instalados en el vacío existencial, en la vaguedad. Estamos de vuelta, olvidando la sencillez del milagro de estar con vida...
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