Existen situaciones en mi vida que luego no sè ni que es lo que voy a escribir o lo que voy a poner en lo que escribo. Lo malo es que cuando me encuentro inmerso en esos estados de ànimo, siento que la vida misma me quita el piso y que nada me separa del abismo y hasta con los dientes busco asirme de cualquier cosa para evitar mi aniquilamiento...Muchas veces me invade una gran angustia, me agito, grito mucho como para tratar de espantar el miedo que se trata de apoderar poco a poco de mi fràgil y dèbil existencia...
¿Cuàl es el futuro del mundo ?
Desde el presente, abarca mares, rìos, lagos, barcos, selvas, bosques, tigres, elefantes, pàjaros, calles, miles y miles de autos y camiones y hormigueros de decenas de millones de animales mal llamados humanos que no paran jamàs en la jungla de asfalto, envueltos cada dìa en la furia de la contaminaciòn de humos negros, blancos, grises que nunca dejan de subir al cielo como un aire de papel celofan amarillento, nada cristalino lleno , repleto de inmundicias...
¿Cuàl futuro?- me pregunto.
El del horizonte, que contemplò Colòn, o el que de seguro tambìen visualizo Neil Armstrong desde su luna, que ya tenìa incluìdo el infierno integrado por cìrculos Dantescos que no importa a dònde se tenga que ir o conquistar, porque de todas maneras, algùn dìa, tarde o temprano, se retornarà al inicio absurdo del eterno mito de Sisifo y su piedra. Futuro de pobreza y hambre que acaba siendo igual en todas partes y que proviene de la manera mezquina de vivir de los ricos, de los poderosos, que acumulan riquezas de paìses explotados y sometidos que les procuran todo y a quienes tratan vilmente mediante sus economìas globalizadoras, extendièndo sus tentàculos por todas partes, procurando dizque contagiarlos de sus maneras absurdas e infrahumanas de vivir:¨ ¿Lo ven? ¿ Se dan cuenta? Si se educan y trabajan como nosotros, se haran fuertes, cultos y felices ¿ De acuerdo ?¨
¡Si, como no!!! Que va...Las esperanzas individuales se cancelan, se olvidan, no hay manera de pensar en lo que sigue, la gente se empieza a convertir en muchos, en muchìsimos, en las mayorìas explotadas, sin tiempo propio para nada y ni modo, alzan un cuarto donde pueden, con tablas, cartones, laminas como techos, para sus mujeres, para sus criaturas, ya saben que tienen que hacer, lo que sea para sobrevivir: El polvo omnipotente del desierto arido de la vida. Chozas flotantes por donde sea, mares de excrementos resecàndose a la intemperie; basureros mezclados con mierda de todos los colores y olores. Allà las espumas de los dolazales verduscos burbujeantes infestados de pestilencia. Acà, basureros eternos nauseabundos y malolientes. Eternos polvos del olvido. La pobreza desvestida, encuerada y reinante por todas partes. Cualquiera que sea su explicaciòn, la pobreza y el hambre viene de los ricos y poderosos y acaba siendo igual en todas partes. La provocan las naciones acaudaladas y lo singular en eso es la desnutriciòn y las enfermedades purulentas
¿Còmo?
Barrancas entre dunas. Tiraderos de desperdicios en todo el mundo. Eterno polvo cadavèrico. Baldios insalubres, latas deformes, envases de plàstico enrroscados, llantas viejas, dirruidas y desgastas. Nidos de cucarachas que se tropiezan unas con otras, de ratas negras y grises en constante acecho perdiendo su apestosa piel en franco enfrentamiento de unas contra otras, de alacranes, de tarantulas pintas silenciosas prontas a embestir a sus presas. Cientos, miles de cuartuchos de mala vida infestados de chinches y arañas flacas, patudas, trepadoras por todas partes. No hay ventanas, no entra el aire, se asfixian. Laminas de cartòn recubiertas de aceite oscuro. La vegetaciòn, impregnada, cubierta, penetrada de sustancias tòxicas corrosivas, de polvos negros y la desolaciòn que avanza, avanza, se dirìa que muy pronto nos va a cubrir a todos como un manto marino repleto de inmundicias que se extiende, sofoca, ahoga y aniquila. Antenas de televisiòn, inmensos bosques de antenas de platos multicolores de cable que transmiten a diario deportes, futbol, comedias. Calles, muchas calles que no van a ninguna parte, hacia ninguna salida. Aire fecal, libre aùn, pero nauseabundo, letrinas al descubierto, contaminaciòn de aguas potables, gente que caga al paso de la gente y sus porquerias se hunden en la tierra y pudren el agua que ya no cuenta con filtros a travès de la arena infectada de suciedades intestinales. Perros sarnosos, ratas chillantes y escurridizas, papeles sucios, chanclas destruìdas, tenis descocidos, cepillos, peines sin dientes, botes de ojalata oxidada y dirruida. El inmenso poder de los animales mal llamados humanos producièndo horror, fealdad y nausea en un mundo aùn hermoso que gira y gira en el espacio hacièndo su mejor esfuerzo soportàndolo todo y a todos...
Pero, allà, donde la nata de smog, que silenciosamente penetra todo, sobresale en el tenue gris del paisaje, lo verde esmeralda del cèsped, donde el càncer mundanal es evitado a toda costa, una mansiòn alambrada con pùas, rodeada de un hermoso jardin, regado con agua cristalina inodora, casa de campo de algùn dirigente social encumbrado que se ha convertido en un millonario obeso y jadeante, por haber vendido su alma al diablo: Cìnica lecciòn de poder y corrupciòn desmedidos: Mitos, leyendas, història, realidad cruda y sorda de nuestro mundo globalizado. Futuro sin riendas, porvenir desbocado...¿Hacia dònde vamos?
Pienso en Filipinas y su salvaje y mortifero tifòn, en los huracanes, sunamis y terremotos de la India. Recuerdo Acapulco, Oaxaca, Chiapas, China y Japòn. Memorias y escenas dolorosas, desgarrantes, inverosìmiles de inmensa pena, de profundo y sangrante dolor. ¿Estamos instalados en la tecnologìa màs avanzada?
Progreso presuroso, desigual, anàrquico, injusto: Corrupciòn y deshonestidad desmedidas, planeaciòn sin rumbo, distribuciòn voraz de todas las riquezas de nuestra MadreTierra...Falta de finalidades: Las selvas mueren, abundan los pesticidas, los humos y àcidos, el aire apesta y enferma. Aguas negras de la vida terrenal que desembocan en todos los mares, agua que mata toda vida. Un sin fin de desperdicios de miseria y desamor, rìos de orines y mierda donde todo va y viene, convirtièndose en infortunio para las inmensas mayorìas desprotegidas, para los seres del inframundo: Salida sin ilusiòn en donde lo ùnico que crece de veras, es la pudredumbre, la fatiga, la languidez, el desànimo con miles de millones de adeptos, itinerario de frustraciones que como las olas del mar van y vienen a màs desànimo, cansancio y frustraciones, todos esperando en las cavernas ante un mundo sin luz, sòlo para unos cuantos que no cesan nunca de explotarlos, en el tugurio de sus vidas animàndolos a no dejar de parir renaciendo, engendràndose, con pàrpados pesados de sueño y cansancio yendo y viniendo siempre aferrados a una moral que los adinerados jamàs respetan...Dias y noches sin atardeceres que no se presentan y no pasan, ni pasaràn. Pelìcula abusiva e irracional con escenas de miles da años de duraciòn, hecha con imagenes repetitivas de miseria, hambre, enfermedad y desolaciòn...
Un mundo producto del pensamiento de grandes inteligencias, de hombres sabios, ahora fruto de la revoluciòn tecnològica-cientìfica: Pantanos por doquier, tierras deserticas que avanzan sin cesar por las planicies, àrboles marchitos sin fin, inmensas nubes de moscas gordas tornasoleadas, panzonas y muchos moscos zumbones en cualquier sitio, frutos de esa infalible revoluciòn ¡pero còmo no! Alabado Dios que nada nos faltarà, alabado sea el señor que nos manda el pan de cada dìa, gracias al todo poderoso ¿Verdad, que si? ¡Faltarìa màs!...Pero no, al parecer, se trata de conseguir en este mundo basureros menos sucios, màs lìmpios, hermosos, donde los niños corran y jueguen entre àrboles muertos, huecos, podridos, envueltos en gases de la basura, rodeados de zopilotes carroñeros, alumbrados por un sol de rayos tenues, humildes, soplando un viento que hace oler todo a excrementos dulces y agrios.
¿ Por què los avances cientìficos no han resultado suficientes para convertir generales los beneficios?
Las mayorìas viven instalados en la pobreza eterna: En guaridas, durmiendo en catres, tapàndose con papel periòdico, con pedazos de plàstico, rodeados de objetos rotos, de espejos desquebrajados que reflejan imagenes incompletas. Chinches, piojos, garrapatas pegajosas, polvo, todos respirando inmundicias pestilentes, vìctimas de robos, asesinatos, violencia: Pienso en Egipto, Bolivia, Belice, Haiti, Panamà, Blangadesh, Perù, Kenia, Nigeria... Un mundo de niños y niñas y jòvenes que haran posible la esclavitud perenne en la que jamàs podràn abandonar la mesa de los mendrugos y las cuevas pletòricas de mugre, humedad y desperdicios, en donde los zombies y los invisibles del dizque progreso cientìfico, se convierten en inquilinos del infierno terrenal, creyendo estar entrando a un destino que los seguirà introduciendo en el mismo cìrculo infernal, dejàndolos sin posibilidad de cambiar a màs...
¿Màs ejemplos?
La violencia dentro y fuera de las dizque casas, donde casì todos los jòvenes y muchos adolescentes, consumen drogas y alcohol y sus padres son borrachos en su mayorìa. Las mujeres de treinta años, parecen de sesenta y los hombres de cuarenta estàn muy parecidos a los ancianos de setenta años. Esos surbios de gente olvidada, abastecen de prostitutas y prostitutos a las zonas comerciales de las grandes ciudades y la niñez apenas come, en su mayorìa son dèbiles mentales por falta de nutrientes. En esos tiraderos urbanos, es el rencor el que acecha a todas horas. En sus covachas, todos continuan viviendo revueltos: animales, perros, padres, hijos, sobrinos, tìas, abuelos, piojos, chinches, arañas, càscaras podridas, excrementos de intestinos eternamente enfermos. Y en esos cuartos, las violaciones, las patizas, los incestos, los vòmitos, existen al orden del dìa. De ahì salen los dolìdos, los malhechores que atacan y atracan sin pena en las zonas de los ricos. Todo se debe a la miseria, esa que en nuestro moderno mundo se carga a donde quiera que se vaya, es un freno para el desarrollo espiritual del mundo. Los ricos barnizan la miseria, con pan y circo y mucho futbol, pero sòlo un tiempo, despuès dejan todo tal como estaba, con el pueblo hambreado, despreciàndose a sì mismos, instalados en la indecencia y la insensatez , suponiendo que su pobreza se debe a que son pobres, desharrapados, suponiendo que ya no tendrà fin hasta su muerte, gritando gooool desde lo màs profundo de sus infectadas gargantas: Pienso en Africa, en Guatemala, el Salvador, Nicaragua, Honduras, Filipinas, Bankok, Afganistan, Mèxico, Siria, Iran...
Impresionante, ¿verdad, lector?
Un mundo de una inmensidad peligrosa, llena de sarna, de lombrices enroscadas, de idiotismo y todas las demàs porquerìas que la revisten, de donde nadie saldrà de ahì, porque nadie ve que ahì està instalado desde siempre, porque ellos no existen sino en su micro mundo sin rostro, sin nombre y piensan que el todo poderoso, allà arriba, harà posible las cosas.
-Mariguana, no, los ojos no los tiene tan rojos, tiner, sì...
La gente pobre le pega al tiner, asì nacieron
-¿Un mundo nuevo, cambiar? ¡Ay Dios! Cambiar, no, ya estamos asì, nos meten a la càrcel...Dios nuestro señor, nos ha regalado este mundo.
¡Caramba! ¿En que siglo estamos? ¿En el de Buda, en el de Cristo, en el de Mahoma? En cualquier otra antiguedad que por remota que fuera, quizàs no serìa tan diferente de lo que ven nuestros ojos en la actual tierra que pisamos. ¿ Dònde estàn los faros de la humanidad, acaso se han fundido, no habrà quien tenga tamaños para recrearlos? ¿ Surgiran otros ? ¿ De dònde emergera el ànimo para hacerlo?
La inframiseria, me provoca nausea, me vence el maldito estomago, vomito y vomito y vomito,flemas, amarillo, agrio, amargo. Reflexiono, lleno de mocos y lagrimas, todo sudoroso veo pasar el presente, contemplo el pasado, las sombras del futuro nunca desaparecen, no lo observo venir.Me derrumbo, caigo, pero aùn no me derroto...
¿Què hemos hecho? ¡Somos unos cobardes! ¿ Hacia dònde vamos ?
¿Cuàl es el futuro del mundo ?
Desde el presente, abarca mares, rìos, lagos, barcos, selvas, bosques, tigres, elefantes, pàjaros, calles, miles y miles de autos y camiones y hormigueros de decenas de millones de animales mal llamados humanos que no paran jamàs en la jungla de asfalto, envueltos cada dìa en la furia de la contaminaciòn de humos negros, blancos, grises que nunca dejan de subir al cielo como un aire de papel celofan amarillento, nada cristalino lleno , repleto de inmundicias...
¿Cuàl futuro?- me pregunto.
El del horizonte, que contemplò Colòn, o el que de seguro tambìen visualizo Neil Armstrong desde su luna, que ya tenìa incluìdo el infierno integrado por cìrculos Dantescos que no importa a dònde se tenga que ir o conquistar, porque de todas maneras, algùn dìa, tarde o temprano, se retornarà al inicio absurdo del eterno mito de Sisifo y su piedra. Futuro de pobreza y hambre que acaba siendo igual en todas partes y que proviene de la manera mezquina de vivir de los ricos, de los poderosos, que acumulan riquezas de paìses explotados y sometidos que les procuran todo y a quienes tratan vilmente mediante sus economìas globalizadoras, extendièndo sus tentàculos por todas partes, procurando dizque contagiarlos de sus maneras absurdas e infrahumanas de vivir:¨ ¿Lo ven? ¿ Se dan cuenta? Si se educan y trabajan como nosotros, se haran fuertes, cultos y felices ¿ De acuerdo ?¨
¡Si, como no!!! Que va...Las esperanzas individuales se cancelan, se olvidan, no hay manera de pensar en lo que sigue, la gente se empieza a convertir en muchos, en muchìsimos, en las mayorìas explotadas, sin tiempo propio para nada y ni modo, alzan un cuarto donde pueden, con tablas, cartones, laminas como techos, para sus mujeres, para sus criaturas, ya saben que tienen que hacer, lo que sea para sobrevivir: El polvo omnipotente del desierto arido de la vida. Chozas flotantes por donde sea, mares de excrementos resecàndose a la intemperie; basureros mezclados con mierda de todos los colores y olores. Allà las espumas de los dolazales verduscos burbujeantes infestados de pestilencia. Acà, basureros eternos nauseabundos y malolientes. Eternos polvos del olvido. La pobreza desvestida, encuerada y reinante por todas partes. Cualquiera que sea su explicaciòn, la pobreza y el hambre viene de los ricos y poderosos y acaba siendo igual en todas partes. La provocan las naciones acaudaladas y lo singular en eso es la desnutriciòn y las enfermedades purulentas
¿Còmo?
Barrancas entre dunas. Tiraderos de desperdicios en todo el mundo. Eterno polvo cadavèrico. Baldios insalubres, latas deformes, envases de plàstico enrroscados, llantas viejas, dirruidas y desgastas. Nidos de cucarachas que se tropiezan unas con otras, de ratas negras y grises en constante acecho perdiendo su apestosa piel en franco enfrentamiento de unas contra otras, de alacranes, de tarantulas pintas silenciosas prontas a embestir a sus presas. Cientos, miles de cuartuchos de mala vida infestados de chinches y arañas flacas, patudas, trepadoras por todas partes. No hay ventanas, no entra el aire, se asfixian. Laminas de cartòn recubiertas de aceite oscuro. La vegetaciòn, impregnada, cubierta, penetrada de sustancias tòxicas corrosivas, de polvos negros y la desolaciòn que avanza, avanza, se dirìa que muy pronto nos va a cubrir a todos como un manto marino repleto de inmundicias que se extiende, sofoca, ahoga y aniquila. Antenas de televisiòn, inmensos bosques de antenas de platos multicolores de cable que transmiten a diario deportes, futbol, comedias. Calles, muchas calles que no van a ninguna parte, hacia ninguna salida. Aire fecal, libre aùn, pero nauseabundo, letrinas al descubierto, contaminaciòn de aguas potables, gente que caga al paso de la gente y sus porquerias se hunden en la tierra y pudren el agua que ya no cuenta con filtros a travès de la arena infectada de suciedades intestinales. Perros sarnosos, ratas chillantes y escurridizas, papeles sucios, chanclas destruìdas, tenis descocidos, cepillos, peines sin dientes, botes de ojalata oxidada y dirruida. El inmenso poder de los animales mal llamados humanos producièndo horror, fealdad y nausea en un mundo aùn hermoso que gira y gira en el espacio hacièndo su mejor esfuerzo soportàndolo todo y a todos...
Pero, allà, donde la nata de smog, que silenciosamente penetra todo, sobresale en el tenue gris del paisaje, lo verde esmeralda del cèsped, donde el càncer mundanal es evitado a toda costa, una mansiòn alambrada con pùas, rodeada de un hermoso jardin, regado con agua cristalina inodora, casa de campo de algùn dirigente social encumbrado que se ha convertido en un millonario obeso y jadeante, por haber vendido su alma al diablo: Cìnica lecciòn de poder y corrupciòn desmedidos: Mitos, leyendas, història, realidad cruda y sorda de nuestro mundo globalizado. Futuro sin riendas, porvenir desbocado...¿Hacia dònde vamos?
Pienso en Filipinas y su salvaje y mortifero tifòn, en los huracanes, sunamis y terremotos de la India. Recuerdo Acapulco, Oaxaca, Chiapas, China y Japòn. Memorias y escenas dolorosas, desgarrantes, inverosìmiles de inmensa pena, de profundo y sangrante dolor. ¿Estamos instalados en la tecnologìa màs avanzada?
Progreso presuroso, desigual, anàrquico, injusto: Corrupciòn y deshonestidad desmedidas, planeaciòn sin rumbo, distribuciòn voraz de todas las riquezas de nuestra MadreTierra...Falta de finalidades: Las selvas mueren, abundan los pesticidas, los humos y àcidos, el aire apesta y enferma. Aguas negras de la vida terrenal que desembocan en todos los mares, agua que mata toda vida. Un sin fin de desperdicios de miseria y desamor, rìos de orines y mierda donde todo va y viene, convirtièndose en infortunio para las inmensas mayorìas desprotegidas, para los seres del inframundo: Salida sin ilusiòn en donde lo ùnico que crece de veras, es la pudredumbre, la fatiga, la languidez, el desànimo con miles de millones de adeptos, itinerario de frustraciones que como las olas del mar van y vienen a màs desànimo, cansancio y frustraciones, todos esperando en las cavernas ante un mundo sin luz, sòlo para unos cuantos que no cesan nunca de explotarlos, en el tugurio de sus vidas animàndolos a no dejar de parir renaciendo, engendràndose, con pàrpados pesados de sueño y cansancio yendo y viniendo siempre aferrados a una moral que los adinerados jamàs respetan...Dias y noches sin atardeceres que no se presentan y no pasan, ni pasaràn. Pelìcula abusiva e irracional con escenas de miles da años de duraciòn, hecha con imagenes repetitivas de miseria, hambre, enfermedad y desolaciòn...
Un mundo producto del pensamiento de grandes inteligencias, de hombres sabios, ahora fruto de la revoluciòn tecnològica-cientìfica: Pantanos por doquier, tierras deserticas que avanzan sin cesar por las planicies, àrboles marchitos sin fin, inmensas nubes de moscas gordas tornasoleadas, panzonas y muchos moscos zumbones en cualquier sitio, frutos de esa infalible revoluciòn ¡pero còmo no! Alabado Dios que nada nos faltarà, alabado sea el señor que nos manda el pan de cada dìa, gracias al todo poderoso ¿Verdad, que si? ¡Faltarìa màs!...Pero no, al parecer, se trata de conseguir en este mundo basureros menos sucios, màs lìmpios, hermosos, donde los niños corran y jueguen entre àrboles muertos, huecos, podridos, envueltos en gases de la basura, rodeados de zopilotes carroñeros, alumbrados por un sol de rayos tenues, humildes, soplando un viento que hace oler todo a excrementos dulces y agrios.
¿ Por què los avances cientìficos no han resultado suficientes para convertir generales los beneficios?
Las mayorìas viven instalados en la pobreza eterna: En guaridas, durmiendo en catres, tapàndose con papel periòdico, con pedazos de plàstico, rodeados de objetos rotos, de espejos desquebrajados que reflejan imagenes incompletas. Chinches, piojos, garrapatas pegajosas, polvo, todos respirando inmundicias pestilentes, vìctimas de robos, asesinatos, violencia: Pienso en Egipto, Bolivia, Belice, Haiti, Panamà, Blangadesh, Perù, Kenia, Nigeria... Un mundo de niños y niñas y jòvenes que haran posible la esclavitud perenne en la que jamàs podràn abandonar la mesa de los mendrugos y las cuevas pletòricas de mugre, humedad y desperdicios, en donde los zombies y los invisibles del dizque progreso cientìfico, se convierten en inquilinos del infierno terrenal, creyendo estar entrando a un destino que los seguirà introduciendo en el mismo cìrculo infernal, dejàndolos sin posibilidad de cambiar a màs...
¿Màs ejemplos?
La violencia dentro y fuera de las dizque casas, donde casì todos los jòvenes y muchos adolescentes, consumen drogas y alcohol y sus padres son borrachos en su mayorìa. Las mujeres de treinta años, parecen de sesenta y los hombres de cuarenta estàn muy parecidos a los ancianos de setenta años. Esos surbios de gente olvidada, abastecen de prostitutas y prostitutos a las zonas comerciales de las grandes ciudades y la niñez apenas come, en su mayorìa son dèbiles mentales por falta de nutrientes. En esos tiraderos urbanos, es el rencor el que acecha a todas horas. En sus covachas, todos continuan viviendo revueltos: animales, perros, padres, hijos, sobrinos, tìas, abuelos, piojos, chinches, arañas, càscaras podridas, excrementos de intestinos eternamente enfermos. Y en esos cuartos, las violaciones, las patizas, los incestos, los vòmitos, existen al orden del dìa. De ahì salen los dolìdos, los malhechores que atacan y atracan sin pena en las zonas de los ricos. Todo se debe a la miseria, esa que en nuestro moderno mundo se carga a donde quiera que se vaya, es un freno para el desarrollo espiritual del mundo. Los ricos barnizan la miseria, con pan y circo y mucho futbol, pero sòlo un tiempo, despuès dejan todo tal como estaba, con el pueblo hambreado, despreciàndose a sì mismos, instalados en la indecencia y la insensatez , suponiendo que su pobreza se debe a que son pobres, desharrapados, suponiendo que ya no tendrà fin hasta su muerte, gritando gooool desde lo màs profundo de sus infectadas gargantas: Pienso en Africa, en Guatemala, el Salvador, Nicaragua, Honduras, Filipinas, Bankok, Afganistan, Mèxico, Siria, Iran...
Impresionante, ¿verdad, lector?
Un mundo de una inmensidad peligrosa, llena de sarna, de lombrices enroscadas, de idiotismo y todas las demàs porquerìas que la revisten, de donde nadie saldrà de ahì, porque nadie ve que ahì està instalado desde siempre, porque ellos no existen sino en su micro mundo sin rostro, sin nombre y piensan que el todo poderoso, allà arriba, harà posible las cosas.
-Mariguana, no, los ojos no los tiene tan rojos, tiner, sì...
La gente pobre le pega al tiner, asì nacieron
-¿Un mundo nuevo, cambiar? ¡Ay Dios! Cambiar, no, ya estamos asì, nos meten a la càrcel...Dios nuestro señor, nos ha regalado este mundo.
¡Caramba! ¿En que siglo estamos? ¿En el de Buda, en el de Cristo, en el de Mahoma? En cualquier otra antiguedad que por remota que fuera, quizàs no serìa tan diferente de lo que ven nuestros ojos en la actual tierra que pisamos. ¿ Dònde estàn los faros de la humanidad, acaso se han fundido, no habrà quien tenga tamaños para recrearlos? ¿ Surgiran otros ? ¿ De dònde emergera el ànimo para hacerlo?
La inframiseria, me provoca nausea, me vence el maldito estomago, vomito y vomito y vomito,flemas, amarillo, agrio, amargo. Reflexiono, lleno de mocos y lagrimas, todo sudoroso veo pasar el presente, contemplo el pasado, las sombras del futuro nunca desaparecen, no lo observo venir.Me derrumbo, caigo, pero aùn no me derroto...
¿Què hemos hecho? ¡Somos unos cobardes! ¿ Hacia dònde vamos ?
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